Desecadores de laboratorio: ¿Por qué son imprescindibles?

En el ámbito científico, la precisión y la exactitud son imperativas. Para garantizar la calidad de los experimentos y la confiabilidad de los resultados, se requiere un control estricto de las variables que pueden afectar las muestras. Una de estas variables cruciales es la humedad, que puede alterar la composición química de las sustancias, dificultar las transferencias de masa e incluso provocar la degradación de los materiales.

Aquí es donde los desecadores entran en juego, desempeñando un papel fundamental en la conservación de muestras sensibles a la humedad. Estos dispositivos, que se han convertido en un elemento indispensable en los laboratorios, son recipientes herméticos diseñados para mantener un ambiente seco y controlado, protegiendo las muestras de la humedad ambiental.

Índice de Contenido

¿Qué es un desecador?

Un desecador es un recipiente de vidrio o plástico con una tapa hermética que contiene un desecante, un material higroscópico que absorbe la humedad del aire. El desecante se coloca en un compartimento inferior, separado de la plataforma donde se ubican las muestras por una rejilla. La tapa del desecador se ajusta perfectamente al cuerpo, creando un sello hermético que evita la entrada de humedad.

El funcionamiento del desecador se basa en el principio de la adsorción. El desecante, gracias a su capacidad de absorción de humedad, atrae las moléculas de agua del aire dentro del desecador, reduciendo la humedad relativa del ambiente y manteniendo las muestras secas.

Tipos de desecadores

Los desecadores se clasifican en diferentes tipos según su diseño y aplicación. Entre los más comunes encontramos:

  • Desecador circular: Este tipo de desecador es el más utilizado en los laboratorios. Es un recipiente de forma circular con una tapa que se ajusta herméticamente al cuerpo. Los desecadores circulares se fabrican en vidrio o plástico, siendo los de vidrio más comunes y económicos.
  • Desecador de gabinete: Este tipo de desecador es más grande que el circular y se utiliza para almacenar muestras de mayor tamaño. Los desecadores de gabinete se fabrican en acero inoxidable, policarbonato o acrílico. Algunos modelos incluyen varias cámaras para la conservación de diferentes tipos de muestras.
  • Desecador al vacío: Este tipo de desecador está equipado con una válvula de vacío que permite extraer el aire del interior del recipiente, creando un ambiente con una presión más baja que la atmosférica. Esto permite acelerar el proceso de desecación y mantener las muestras en un ambiente aún más seco.

Materiales utilizados en la fabricación de desecadores

Los desecadores se fabrican con diferentes materiales, cada uno con sus propias ventajas y desventajas:

  • Vidrio: El vidrio es un material transparente que permite observar las muestras sin necesidad de abrir el desecador. Es resistente a la mayoría de los productos químicos y es relativamente económico. Sin embargo, es frágil y puede romperse fácilmente.
  • Plástico: El plástico es un material resistente a los impactos y a la corrosión. Es más ligero que el vidrio y es más fácil de limpiar. Sin embargo, no es tan resistente a los productos químicos como el vidrio y puede ser menos transparente.
  • Acero inoxidable: El acero inoxidable es un material resistente a la corrosión y a los impactos. Es un material duradero y fácil de limpiar. Sin embargo, es más caro que el vidrio y el plástico.

Importancia de los desecadores en el laboratorio

Los desecadores son instrumentos esenciales en el laboratorio, ya que desempeñan un papel fundamental en:

  • Conservación de muestras sensibles a la humedad: Los desecadores protegen las muestras de la humedad ambiental, evitando que se deterioren o se alteren sus propiedades químicas.
  • Preparación de muestras para análisis: Algunas técnicas analíticas requieren que las muestras estén completamente secas. Los desecadores se utilizan para eliminar la humedad de las muestras antes de su análisis.
  • Almacenamiento de reactivos higroscópicos: Los reactivos higroscópicos son sustancias que absorben la humedad del aire, lo que puede afectar su composición química. Los desecadores se utilizan para almacenar estos reactivos y evitar que se deterioren.
  • Calibración de instrumentos: Algunos instrumentos de laboratorio, como los higrómetros, deben calibrarse en un ambiente seco. Los desecadores se utilizan para crear un ambiente seco y controlado para la calibración de estos instrumentos.

Desecantes: El corazón del desecador

Los desecantes son el elemento clave en los desecadores. Estos materiales higroscópicos absorben la humedad del aire, creando un ambiente seco dentro del recipiente. Algunos de los desecantes más comunes son:

  • Gel de sílice: El gel de sílice es un material poroso que absorbe la humedad del aire. Es un desecante muy eficaz y económico, y se utiliza en una amplia variedad de aplicaciones.
  • Ácido sulfúrico concentrado: El ácido sulfúrico concentrado es un desecante muy potente, pero también es corrosivo. Se utiliza en aplicaciones donde se requiere una desecación muy eficiente.
  • Óxido de fósforo (V): El óxido de fósforo (V) es un desecante muy potente que se utiliza en aplicaciones donde se requiere una desecación muy eficiente. Es un material corrosivo y debe manipularse con precaución.
  • Hidróxido de potasio: El hidróxido de potasio es un desecante que se utiliza para eliminar la humedad del aire. Es un material corrosivo y debe manipularse con precaución.
  • Sulfato de sodio anhidro: El sulfato de sodio anhidro es un desecante que se utiliza para eliminar la humedad del aire. Es un material no corrosivo y se utiliza en una amplia variedad de aplicaciones.
  • Magnesio anhidro: El magnesio anhidro es un desecante que se utiliza para eliminar la humedad del aire. Es un material no corrosivo y se utiliza en una amplia variedad de aplicaciones.

Medidas de seguridad al utilizar desecadores

Aunque los desecadores son herramientas relativamente sencillas de utilizar, es importante tomar ciertas precauciones para garantizar la seguridad y la eficacia del proceso de desecación:

  • Evitar cambios bruscos de temperatura: Si las muestras se encuentran a altas temperaturas, es importante dejarlas enfriar antes de colocarlas en el desecador para evitar cambios bruscos de presión que podrían dañar las muestras o el desecador.
  • Abrir el desecador con cuidado: Al abrir el desecador, hacerlo de forma deslizante para evitar cambios bruscos de presión que puedan afectar las muestras.
  • Utilizar el desecante adecuado: Es importante seleccionar el desecante adecuado para las muestras y el procedimiento. Algunos desecantes no son compatibles con ciertas sustancias, y otros pueden actuar demasiado rápido, lo que puede dañar las muestras.
  • Mantener el desecador limpio: Es importante mantener el desecador limpio y libre de polvo y residuos para evitar la contaminación de las muestras.
  • Sellar el desecador correctamente: Es importante sellar el desecador correctamente para evitar la entrada de humedad. Si se trabaja con materiales altamente higroscópicos, se deben guardar en recipientes herméticos.
  • No mover la tapa mientras el desecador está en funcionamiento: Esto es especialmente importante para los materiales higroscópicos, ya que el movimiento de la tapa puede introducir humedad en el desecador.

Aplicaciones de los desecadores

Los desecadores tienen una amplia gama de aplicaciones en diferentes áreas, incluyendo:

  • Química: Los desecadores se utilizan para almacenar reactivos higroscópicos, preparar muestras para análisis, y realizar reacciones químicas que requieren un ambiente seco.
  • Farmacia: Los desecadores se utilizan para almacenar medicamentos sensibles a la humedad, preparar soluciones para la administración de medicamentos, y realizar análisis farmacológicos.
  • Biología: Los desecadores se utilizan para almacenar muestras biológicas, como tejidos y células, y para preparar muestras para análisis microscópicos.
  • Ingeniería: Los desecadores se utilizan para almacenar componentes electrónicos sensibles a la humedad, para realizar pruebas de resistencia a la humedad, y para preparar materiales para la fabricación.
  • Investigación: Los desecadores se utilizan en una amplia variedad de investigaciones científicas, desde la química orgánica hasta la biología molecular.

¿Cómo se utiliza un desecador?

Para utilizar un desecador, primero se debe colocar el desecante en el compartimento inferior. Luego, se coloca la plataforma con las muestras en el compartimento superior. Finalmente, se cierra la tapa del desecador y se sella herméticamente. Para abrir el desecador, se debe deslizar la tapa lentamente para evitar cambios bruscos de presión.

¿Con qué frecuencia se debe cambiar el desecante?

La frecuencia con la que se debe cambiar el desecante depende del tipo de desecante utilizado y de la cantidad de humedad en el ambiente. En general, se recomienda cambiar el desecante cada 3-6 meses.

¿Qué sucede si se introduce una muestra húmeda en un desecador?

Si se introduce una muestra húmeda en un desecador, la humedad de la muestra se transferirá al desecante, lo que reducirá la eficacia del desecante. En algunos casos, la humedad de la muestra puede saturar el desecante, lo que puede dañar las muestras o el desecador.

¿Qué tipo de desecador se debe utilizar para almacenar reactivos higroscópicos?

Para almacenar reactivos higroscópicos, se recomienda utilizar un desecador al vacío. Esto permitirá crear un ambiente con una presión más baja que la atmosférica, lo que ayudará a mantener los reactivos secos.

¿Qué tipo de desecante se debe utilizar para almacenar materiales sensibles a la luz?

Para almacenar materiales sensibles a la luz, se recomienda utilizar un desecador de vidrio ámbar. Este tipo de desecador bloquea la luz UV, lo que ayuda a proteger los materiales sensibles a la luz.

Los desecadores son instrumentos esenciales en el laboratorio, ya que permiten mantener las muestras secas y protegidas de la humedad ambiental. Su uso es fundamental en una amplia variedad de aplicaciones científicas, desde la química hasta la biología y la ingeniería. Es importante utilizar el desecador adecuado para las muestras y el procedimiento, y seguir las medidas de seguridad necesarias para garantizar la seguridad y la eficacia del proceso de desecación.

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